¡Buenas tardes! ¿Qué tal va esa semana? Nosotras estamos con los ojos puestos en Asia: en la última entrada os hablábamos de un producto de limpieza facial de Missha, una archiconocida marca coreana de cosméticos, y hoy seguimos con otra web que quizá no conozcáis: Keautystore. Esta tienda online también es coreana y nos ofrece maquillaje de Etude House, Lioele, Tonymoly, Skinfood, Nature Republic… en fin, ¡seguro que os suenan!, poco a poco la cosmética asiática se está haciendo un hueco entre las consumidoras europeas, y es que sus productos son de buena calidad -con lo que obtenemos buenos resultados- y tienen un packaging que engancha.
Hice mi pedido hace unos meses y en un par de semanas estaba en casa: tened en cuenta que debe llegar desde otro continente, tenemos que ser pacientes. En un principio me decepcionó un poco que no incluyeran ninguna muestra en el paquete, ya que el pedido fue relativamente grande… aunque cuando fui abriendo y toqueteando los productos me gustaron tanto que se me olvidó el tema de las muestras -hago hincapié en esto porque muchas webs asiáticas son conocidas por enviar casi tantas muestritas como productos hemos pedido, ¡es una maravilla!, aunque no es el caso de Keautystore-. A continuación os pongo una fotografía del maquillaje que pedí:
Precioso, ¿verdad? Y es que muchas veces consumimos productos «con los ojos», por su precioso packaging, por los colores… Esa barra de labios merece un lugar de honor en mi colección de potingues, lo tengo claro. Llevo ya unos meses probando todos los productos, así que os haré una breve reseña de cada uno de ellos, incluyendo también el enlace a la web por si os apetece echar un vistazo.
Necesitaba un eyeliner negro y opté por pedir este, Oh my eye de Etude House. El aplicador es un pincelito muy fino y de pelitos duros, lo que facilita la aplicación y evita que nos dejemos los ojos hechos un estropicio. El color es negro puro, ligeramente brillante al secar pero no con efecto vinilo. El resultado me gusta y la aplicación es muy sencilla, lo que no me gusta tanto es retirarlo: parece un producto waterproof, así que nos exige frotar e insistir hasta eliminar todos los restos adheridos a las pestañas. Salvo por ese detalle, dura muchas horas intacto y el envase es práctico.
Este iluminador BB touch de Lioele fue una compra compulsiva y nada meditada: no necesitaba iluminadores y no me vuelven loca los productos en crema. Sin embargo, me ha sorprendido gratamente: el aplicador, a pesar de parecer enorme, dosifica muy bien la cantidad de producto que aplicamos; la textura del iluminador es fina, delicada y con un diminuto shimmer que de verdad proporciona luz al rostro. Lo estoy utilizando mucho para iluminar la zona alta del pómulo, el arco de la ceja y el arco de Cupido. Me parece un producto maravilloso para la primavera, aunque no es lo tuyo si te gustan los productos totalmente mate. El envase necesita una limpieza regular, podemos lavar la brochita en agua y jabón sin problema. Con pulsar una vez el botón del envase tenemos la dosis perfecta para un día o dos. ¡Bien por Lioele!
Otro de los productos que pedí y me cautivó nada más verlo fue este Lovely Cookie Blusher, de Etude House. Debo reconocer que el aspecto de los productos me invita a comprarlos, y en este caso me conquistaron sus preciosas tonalidades, su packaging sencillo pero mono y ese diminuto pompón para aplicarlo, que recuerda a los tocadores clásicos. ¡Es irresistible! Pedí el tono 02, Strawberry Choux, un tono fresa mucho más pálido de lo que parece en la web. Yo soy extremadamente pálida, y este colorete va perfecto para pieles muy claras… pero apenas se percibe en otras tonalidades más subidas. La textura es agradable y nada polvorienta, yo utilizo el propio aplicador que trae para dejar un rubor leve en las mejillas. No esperéis que dure horas intacto, pero la relación calidad precio es muy interesante.
Y, por último… ¡la joya de la corona! Es el labial Etoinette Crystal Shine de Etude House, uno de sus productos de la colección limitada Princess Etoinette, inspirada en los tocadores victorianos y en una belleza inocente, delicada y muy femenina. Toda la colección es maravillosa y me la compraría enterita, sin pensarlo. Este labial tiene un precio, en mi opinión, desorbitado. Sin embargo, un capricho es un capricho y hay que decir que el packaging es maravilloso, muy cuidado, hasta el último detalle… ¡fijaos que la propia barra lleva grabada la «E» de la marca en el producto! Es un producto de culto, uno de esos que tienes en tu colección para observar y disfrutarlo. El tono es el PPK001, un rosa palo intenso que en los labios no lo es tanto: deja un velo delicado de rosa brillante y muy clarito, perlado con diminutas partículas plateadas. Una preciosidad, aunque no se parece en nada el tono de la barra que el que deja sobre nuestros labios. La duración tampoco es una locura: no resiste a comer ni a beber. La textura es agradable, suave e hidratante. Realmente pagamos el diseño y la colección, porque la calidad del labial no es nada inaudito. Sin embargo… ¡lo amo y repetiría la compra!
Os incluyo también mi vídeo reseña sobre estos productos de belleza asiática:
Y hasta aquí llega mi entrada de hoy. ¿Utilizáis maquillaje de marcas asiáticas como Etude House? ¿Cuál es vuestra tienda de cosmética coreana favorita?