Hola chicas, cómo va yendo la semana?
Aunque en muchos sitios de España ya hayan llegado las tormentas, por aquí seguimos disfrutando de unos días de sol y calor formidables, y con ello aumentan nuestras ganas de playa, de mar, de ponerse morena y de disfrutar del verano. Yo este año me he propuesto ponerme tan morena como cuando iba todos los días a la playa, pero sin ir todos los días a la playa (porque no se puede…), y para eso, me he puesto manos a la obra con trucos caseros que harán que coja moreno antes y que se me vaya más tarde, ¿te quedas para averiguarlo?
Primero, me gustaría destacar que tomar el sol sin protección no hará que te pongas morena antes, si no que te
expondrá a muchísimos riesgos de salud, como manchas, quemaduras, ampollas e incluso cáncer. Mejor prevenir y hacer las cosas bien, por lo que deberemos usar una crema solar (del tipo que nos guste) acorde con nuestra exposición al sol e ir renovándola cada poco, sobre todo al salir del agua.
Alimentación: desde dentro
Hay ciertos alimentos que nos ayudarán a coger antes el bronceado, por ser ricos en betacarotenos, estimulantes de la melanina, «culpable» de que nuestra piel se ponga morena. Alimentos como las espinacas, las zanahorias, los tomates o los pimientos serán nuestros amigos.
Otro elementos que tenemos que tener en cuenta en los alimentos es la existencia de flavonoides. Los flavonoides son pigmentos naturales que protegen al organismo de los daños producidos por elementos oxidantes como puede ser los rayos ultravioletas (y otros como la contaminación ambiental o mísmamente sustancias nocivas de los alimentos). Están presentes en numerosas plantas, frutas y verduras, como ajo, manzanas, tomates y melón, y también en bebidas como el vino, la cerveza al té negro y el té verde, por lo que estos alimentos y bebidas también serán tus amigos, y no sólo en verano!
Para el mantenimiento, la zanahoria y el tomate siguen siendo grandes aliados, pero también se unen regenerantes como el aloe vera (siempre es bueno tener una plantita!), la rosa mosqueta o el aceite de coco. Cuando utilicemos aceites esenciales, tendremos que tener mucho ojo en que no sean fotosensibles, pues al exponernos al sol podrán dejarnos manchas.
En general, apuesta por alimentaos ricos en flavonoides, antioxidantes, vitaminas y betacarotenos, y si es natural, mucho mejor! Y como no, super importante beber mucha agua, es la base de la hidratación por dentro, y recordad que la sed empieza cuando ya nos estamos deshidratando, y debemos adelantarnos.
Hidratación: desde fuera
La hidratación es una de las cosas más importantes a la hora de conseguir un bronceado, y ojo! No vale con cuidarla sólo julio y agosto, si no que has de hacerlo todo el año. Deberás llevar una exfoliación semanal o cada quince días, y aplicar una hidratante a diario.
Exfoliante natural: mezcla un vaso de aceite de oliva o miel con medio vaso de sal marina y el juego de un limón.
Mezcla todo y aplícatelo antes de la ducha, dejando actuar durante dos minutos para así también aportar hidratación. La sal será la encargada de exfoliar, pero también podrás utilizar otros elementos como azúcar, tanto blanco como moreno, o café, que ayudará también a rejuvenecer la piel.
Hidratante natural: uno de los más conocidos es el aceite de oliva, pero para así también potenciar el bronceado, cogeremos un tomate, lo cortaremos a la mitad y lo utilizaremos de «aplicador» del aceite. También es muy bueno y refrescante para hacerlo tras la depilación. Se echará aceite en el tomate, y simplemente habrá que esparcirlo por el cuerpo. No hagas muchas presión, o el tomate se deshará, acabarás demasiado embadurnada y querrás volver a la ducha por oler a ensalada 🙂
El aloe vera o algún otro regenerante tras la exposición solar también contribuirá a que no pelemos y la piel siga hidratada y sin sentir los daños; pero como hemos dicho, debemos tener mucho cuidado de no exponernos después al sol, pues pueden salir manchas.
Con estos pequeños trucos que podemos incorporar a nuestra vida diaria harán que nuestro moreno luzca
más bonito y durante mucho más tiempo. Lo importante no es pasarnos todo un día al sol, si no que es mejor más días y menos tiempo, que más tiempo menos días, por lo que no te obsesiones si te has pasado todo el día en la playa, y todo sigue igual. Además de que, hasta después de la ducha parece que no se ven los resultados!
Y tú, ya has disfrutado de los primeros rayos? Cuidas tu piel del sol?